jueves, 17 de septiembre de 2009

Apéndice XIII del Diccionario del diablo de Ambrose Bierce

Ron, s. Bebida ardiente que produce locura en los abstemios

Ruido, s. Olor nauseabundo en el oído. Música no domesticada. Principal producto y testimonio probatorio de la civilización.

Rumor, s. Arma favorita de los asesinos de reputaciones.

Sabbath, s. Sábado para los judíos, domingo para los cristianos. Fiesta semanal que tiene su origen en el hecho de que Dios hizo el mundo en seis días y fue detenido el séptimo. Entre los judíos, la observancia de la festividad estaba ordenada por un Mandamiento cuya versión cristiana es: "Recuerda, al séptimo día, hacer que tu prójimo lo respete plenamente". Al Creador le pareció apropiado que el Sabbath fuera el último día de la semana, pero los primitivos Padres de la Iglesia opinaban de otro modo.

Sabiduría, s. Tipo de ignorancia que distingue al estudioso.

Saciedad, s. Ese sentimiento, señora, que uno experimentaba por el plato después de tragar su contenido.

Sacramento, s. Solemne ceremonia religiosa a la que se atribuyen diversos grados de eficacia y significación. Roma tiene siete sacramentos, pero las iglesias protestantes, menos prósperas, sólo pueden permitirse dos, y de inferior santidad. Algunas sectas menores no tienen sacramentos en absoluto: ahorro vil que indudablemente las llevará a la perdición.

Salacidad, s. Cualidad literaria de frecuente observación en las novelas populares, especialmente las escritas por mujeres y muchachas, que le dan otro nombre y piensan que están ocupando un campo descuidado de las letras y recolectando una cosecha desdeñada. Si tienen la desgracia de vivir el tiempo suficiente, las atormenta el deseo de quemar sus gavillas.

Salamandra, s. Originariamente, reptil que habitaba el fuego; después, inmortal antropomorfo, igualmente pirófilo. Se cree que las salamandras se han extinguido; la última de que tenemos noticias fue vista en Carcasonne por el padre de Belloc, quien la exorcisó con un balde de agua bendita.

Salsa, s. Unico signo infalible de civilización y progreso. Pueblo sin salsas, tiene mil vicios; pueblo de una sola salsa, tiene novecientos noventa y nueve. A salsa inventada y aceptada, corresponde vicio renunciado y perdonado.

Santo, s. Pecador fallecido, revisado y editado. La Duquesa de Orléans refiere que aquel viejo e irreverente calumniador, el mariscal de Villeroi, que en su juventud había conocido a San Francisco de Sales, dijo al oír que lo consideraban un santo: "Estoy encantado de enterarme de que Monsieur de Sales era un Santo. Le gustaba decir groserías y solía trampear a los naipes. Por lo demás, era un perfecto caballero, aunque un tonto".

2 comentarios:

  1. Anónimo12:27

    Muy ocurrentes las palabras del diccionario, como siempre...
    La de salamandra de encantó.
    Un gusto leerte, Jorge. Saludos!

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  2. Anónimo23:20

    Me gustó la definición de ruido. Que pena que algunos oídos no tengan buen olfato.
    Nos vemos.Laura.

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