lunes, 1 de marzo de 2010

Georges Perec: El gabinete de un aficionado. Historia de un cuadro


Jorge Aloy

Editorial Anagrama

Tercera edición

2008

Traducción: Menene Gras Balaguer

109 Páginas


El gabinete de un aficionado. Historia de un cuadro nos niega un héroe de carne y hueso. En apariencia, el protagonista es una llamativa tela pintada por Heinrich Kürz. En ella figura la colección completa de cuadros de su propietario, un tal Hermann Raffke. Dentro de la pintura se halla el propio Raffke, sentado en su gabinete, observando sus cuadros. Lo sorprendente está en el centro de la escena: el lienzo en cuestión también está reproducido, como uno más, entre los otros. Y dentro de este cuadro dentro del cuadro, la escena se reitera.
Es una técnica que se remonta, quizá me equivoque, a Las meninas de Velázquez y que reaparece en la literatura, el cine, el teatro, la historieta, los dibujos animados y la fotografía.
Las meninas de Velázquez (1656) es una pintura que muestra el taller de un pintor. En el taller surge el pintor, es decir el propio Velázquez y, en el centro de la escena aparece la infanta Margarita de Austria. En las paredes cuelgan otras pinturas y entre ellas luce un espejo con las figuras de los reyes Felipe IV y Mariana de Austria. Esta proyección quizá se deba a que Velázquez en ese momento los estuviera retratando. Es una perspectiva denominada Mise en abyme (llamada así, se dice, por André Gide en 1891) o, dicho en castellano Puesta en abismo. Como punto característico se puede decir que mantiene un reflejo por similitud, es una imagen especular que da la idea de que hay una historia dentro de la historia. Y como todos imaginamos, por el juego de los espejos, la imagen se hace infinita.
Perec juega con la posibilidad de lo infinito pero no como un eterno retorno, sino como una vuelta a un tiempo que no se estanca. Siempre se retorna a un lugar distinto, insospechado. Por ejemplo, la figura de un boxeador que recibe un golpe en la primera imagen, en la siguiente ya está en la lona.
Estas mutaciones de las pinturas fueron observadas con insistencia por el público en la única exposición que se realizó. Los observadores remarcaban las diferencias que se sucedían de un cuadro a otro ya que utilizaban lupas para encontrar los pormenores más escondidos.
La novela es un discurso sobre una pintura. Se destaca en clave irónica la idea taxonómica de las descripciones de los cuadros. Podríamos creer que el relato habla de las posibilid
ades del arte o de lo que los hombres seríamos capaces de hacer ante el valor económico que domina a las obras de arte. Podríamos creer cualquier cosa, ya que en el desenlace nada vuelve a ser lo que era.
Perec, como si fuera poco, es riguroso con los detalles: en todo momento añade pinceladas de verosimilitud. Utiliza un método borgeano en cuanto a la abundancia y exactitud de datos, con el único fin de convencernos de una verdad que la literatura utiliza para afianzar el mundo ficticio que construye.
El gabinete de un aficionado. Historia de un cuadro es el último libro publicado en vida de Georges Perec (Francia 1938-1982) y no podemos decir menos que es una gran y estupenda broma.

2 comentarios:

  1. Julie20:50

    ...la historia dentro de la historia... forma emparentada con el tema del doble ¿no? Me simpatiza Perec (La vie, mode d'emploi), nunca lo leí ni sé si lo voy a leer alguna vez. Asocio con dos cosas que pùeden añadirse a tu comentario: el cuento de Cortazar (cómo se llamaba? ...no sé que cosa "en los parques") y las imágenes en abismo en el espejo de una película de Welles con Ava Gardner a la que él hizo teñir de rubio,un policial fuera de género, desplazado del género, una especie de melodrama modernista, La Dama de Shanghai, pasión de cinéfilos.
    Luego tenemos Las Meninas en la lectura de Foucault ,única respuesta rigurosamente formulada al inmenso interrogante de la pintura en cuestión, maravilla que se encuentra, como se sabe, en Las palabras y las cosas, al comienzo y en donde el asunto es algo diferente...
    Me gusta de tu blog la primacía que le das al texto de los autores...Los incipits, está muy buena esa entrada. Me gustan los comienzos de Arlt y el de Quiroga, en este último caso me alegra, además, haber pispeado ese cuento después de muchísimo tiempo, es bastante fascinante (yo creo que Hanecke lo leyó, lo digo por Caché). Gracias por lo tuyo blogspoter...

    ResponderEliminar
  2. Anónimo5:38

    What's up, everything is going fine here and ofcourse every one is sharing information, that's trulу fine, κeep up
    wгiting.

    my page ... www.prweb.com/releases/silkn/sensepilreview/prweb10193901.htm

    ResponderEliminar

Comentarios a este artículo: